MERCADILLO DE NAVIDAD EN VIENA.

Paseo por el centro vienés antes de Navidad para ver lo imprescindible.

Felices fiestas

Estamos a tiempo de hacer una de esas escapadas reconfortantes para ir rodeándonos de espíritu navideño con todos los ingredientes: decoración festiva, frío con (algo de, o mucha) nieve, puestos para comprar regalos, y hasta vino caliente.

Rathausplatz vino caliente

Además, hay vuelos directos desde varios lugares de España, así que es cómodo llegar. Os hablamos de Viena, una de las capitales europeas a las que les sienta bien la Navidad; a la vez os proponemos un recorrido por el centro para ver los lugares más emblemáticos o más bonitos, aunque sean menos conocidos.

Como mínimo se necesitan varios días para ver museos, palacios por dentro, y asistir a algún espectáculo, pero para disfrutar del ambiente festivo y ver lo imprescindible, con un fin de semana puede bastar, más la llegada y salida, de viernes a domingo, por ejemplo.

Viena es una ciudad monumental donde las haya, así que intentar ver todos los museos, iglesias, cafés, tiendas, fuentes, palacios -sobre todo barrocos-, estatuas y memoriales, entre otro montón de atracciones, es imposible si no vamos un mes, por lo que hay que escoger y dejarse llevar.

Decoración navideña Viena

Empezamos nuestros paseos en la estación central de Viena, la Wien Hauptbahnhof, a donde se puede llegar con un tren directo desde el aeropuerto en 15 minutos, por 4,50€. Salimos hacia la Wiedner Gürtel, para ver unos curiosos bloques de pisos de colores pastel (aunque no sean tan pintorescos como las famosas viviendas de Hundertwasserhaus, algo más alejadas, entre la Kegelgasse y las Löwengasse; habría que verlas en otro momento, si nos quedáramos varios días en Viena).

Puertas jardines Bellvedere
Bellvedere 300 años

Nosotros paseamos hacia el Schweizergarten, el Jardín Suizo, y luego el Palacio de Bellvedere (Schloss Belvedere), que en realidad son tres grandes edificios barrocos convertidos ahora dos en museos, separados por unos espectaculares jardines organizados en tres niveles con fuentes y estatuas que representan diversas alegorías, y el tercero es un hotel (Palacio Schwarzenberg). En el Bellvedere superior, que tiene unas buenas vistas al centro de la ciudad, están los Museos de Arte Barroco y de Arte Medieval austríacos, pero el más interesante es del siglo XIX-XX sobretodo, imprescindible: la Galería Belvedere, con obras de Gustav Klimt, Egon Schiele, Oskar Kokoschka o Max Oppenheimer.

Embajada francesa

Seguimos paseando hacia el casco histórico por el Rennweg; nos encontramos con otros edificios impresionantes, como la embajada de Francia (Französische Botschaft), la Iglesia de San Carlos Borromeo (Karlskirche, Catedral de los Habsburgo del s. XVIII), el Akademietheater, y también la Ópera Estatal de Viena (Wiener Staatsoper, Opernring 2), lugar emblemático de la música mundial, donde hay visitas guiadas en varios idiomas, y que recomendamos para escuchar alguna representación por la noche o incluso de día (http://www.wiener-staatsoper.at).

Una parada para calentarnos en un lugar lujoso y especial es el Café del Hotel Sacher, aunque encontramos una cola muy larga para entrar. Allí hay que tomar una supertípica tarta Sacher (Sachertorte), que son dos planchas gruesas de bizcocho de chocolate y mantequilla separadas por una fina capa de mermelada de albaricoque y recubiertas con un glaseado de chocolate negro ¡ligero, ligero!

Podemos acercarnos al Parque de la ciudad (Stadtpark) si tenemos tiempo, y no mucho frío.

Ambiente navideño Viena

Si queremos bullicio, hay que callejear para contemplar las decoraciones navideñas del centro: la Domgasse, por ejemplo, y en la Annagasse, la calle de las iglesias, están por este orden la Iglesia de Santa Ana (Annakirche), la interesante iglesia de la orden de Malta de San Juan Bautista (St. Johannes der Täufer), y por fin la Iglesia de los Capuchinos, (Katholische Kapuzinerkirche, Hl. Maria von den Engeln, Nuestra Señora de los Ángeles).

Konditorei Sluka

Otra pausa -necesaria ya para descansar y calentarnos o tomar la tarta Sacher ahora, si no hemos conseguido aguantar la cola del hotel del mismo nombre- la podemos hacer en la bonita Konditorei Sluka de la calle Kärntner. Casi al lado ya tenemos la totalmente imprescindible catedral gótica de San Esteban (Domkirche St. Stephan), donde cada detalle es una maravilla arquitectónica y escultórica.

Domkirche St. Stephan detalle
Dom/Catedral

Nos podemos acercar por detrás de la catedral a la casa de Mozart (Domgasse, 5), un piso restaurado del siglo XVIII donde vivió el compositor, ahora convertido en un museo con recuerdos y audioguías.

Nuestro paseo para contemplar decoraciones navideñas nos acerca luego a la Columna de la Peste de Viena (Wiener Pestsäule), levantada en 1679 en estilo barroco y dedicada a la Santísima Trinidad, después de la gran epidemia que dejó más de 75.000 muertos en la ciudad.

Kohlmarkt hacia MIchaelerplatz

Nos adentramos en la zona de tiendas lujosas de las calles Graben y Kohlmart, hacia la Michaelerplatz, para encontrarnos enseguida con el Palacio Imperial de Hofburg, el más grande de Viena, construido por los Austrias con interiores ornamentados barrocos, donde hay aposentos y tesoros imperiales que se pueden visitar, y unos cuantos museos, como el famoso Sisi Museum, con recuerdos de esta emperatriz. Una atracción turística de este lugar es la Escuela Española de Equitación (Spanische Hofreitschule, www.srs.at), pues fue designada en 2015 por la Unesco como Patrimonio Cultural Inmaterial de la Humanidad, junto con la equitación clásica. Ofrece visitas guiadas y espectáculos ecuestres de doma clásica española, y cuentan la cría y doma de caballos de la raza lipizzana, original de Eslovenia, que son negros o muy oscuros de potros y progresivamente gris claro o blancos de adultos.

Minoritenkirche

Salimos por la Schweizertör hacia la Plaza de los Héroes (Heldenplatz) para ver la otra parte de este enorme Palacio Hofburg, pero luego, para salir del trillado circuito clásico del centro, volvemos hacia la menos conocida Minoritenkirche, una preciosa iglesia gótica del siglo XIIII-XIV, de la comunidad italianoparlante de Viena, (https://www.minoritenkirche.wien/, Minoritenplatz 2A). Aquí destaca un mosaico de la Última Cena de Da Vinci, entre otras obras de arte.

Rathausplatz Markt

Por fin llegamos a lo que nos ha atraído hasta Viena, al mercadillo navideño o mercado de Adviento, como le llaman por aquí: está en la plaza y parque del Ayuntamiento (Rathausplatz, Rathauspark). Vamos recorriendo algunos de sus coquetos puestos de regalos y nos tomarnos un Glühwein, un vino blanco caliente con especias –en Alemania usan más el vino tinto para hacerlo-, que con este frío reconforta mucho.

Votivkirche

Como colofón, escuchamos un concierto navideño de música clásica en la Votivkirche (www.votivkirche.at), iglesia neogótica de 1879, construida para agradecer que el emperador salió indemne de un intento de magnicidio. Está en el Sigmund Freud Park.

Maria-Theresien-Platz

Para ampliar el recorrido: la zona de más museos monumentales, alrededor de la Maria-Theresien-Platz, donde hay algunos otros puestos navideños, y se pueden visitar el Museo de Historia del Arte (Kunsthistorisches Museum Wien) y el de Historia Natural (Naturhistorisches Museum Wien).

Si ya nos quedáramos mucho tiempo, aún con mala climatología, no podemos dejar de pasear hacia el Palacio de Schönbrunn, el “Versalles vienés”, un palacio más pequeño que es famoso también por la emperatriz Sisí.

Rathauspark

Igualmente podríamos curiosear el Wiener Prater, conocido simplemente como Prater, que es un enorme parque público en el distrito de Leopoldstadt, junto al Danubio, con muchos entretenimientos para los niños y mayores, tipo noria gigante (Wiener Reisenrad), la Kugelmugel (una sala de exposiciones con forma de esfera, declarado república independiente por el artista que lo construyó), etc. Al otro lado del centro, hacia el sur, está el Böhmischer Prater (el Prater de Bohemia), otro pequeño parque de atracciones que tiene más de 100 años, cerca del barrio de Favoriten.

  • Cómo llegar: Aeropuerto Internacional de Viena (Flughafen Wien-Schwechat), con vuelos directos desde varias ciudades. Se puede ir en tren directamente al centro –Hauptbahnhof Wien- con las líneas RJX864, RJX698, cada 15 minutos. Mejor consultar horarios, precios y descuentos en Home – ÖBB (oebb.at).
  • Dónde tomar algo: Konditorei Sluka (www.sluka.at), Kaertner Strasse 13 -15

Hotel Sacher (www.sacher.com), Philharmoniker Str. 4, 1010 Wien, Austria, un hotel de lujo de cinco estrellas con un pasado extenso y un presente brillante, aunque si se quiere emular a las estrellas de la ópera o los distintos gobernantes, hay que llevar un buen presupuesto.

  • Un espectáculo: Ópera Estatal de Viena. Una característica distintiva de las representaciones es la de las localidades de pie (Stehplätze), que se venden a precios muy reducidos en una taquilla especial, 90 minutos antes de empezar la representación. También se puede mirar la web con un poco de antelación (Wiener Staatsoper (wiener-staatsoper.at).

Y en casi cada iglesia puede haber varios conciertos de Adviento y Navidad, cuyos programas están en sus páginas web y pueden ser una delicia y a veces una sorpresa, como en nuestro caso en la Votivkirche.